Discurso de la presidenta de CAMTUR, Marina Cantera, en el marco de la celebración del Día Mundial del Turismo

 

Estimadas autoridades nacionales y departamentales, representantes de organismos públicos, colegas del sector, medios de comunicación y amigos del turismo: 

Es una enorme alegría recibirlos esta noche para celebrar juntos el Día Mundial del Turismo. Esta fecha nos invita a detenernos por un momento, en medio de nuestras agendas siempre intensas, para mirar hacia atrás con orgullo y hacia adelante con esperanza.

El turismo es mucho más que cifras en un informe o estadísticas de temporada. Es una actividad que toca la vida de miles de uruguayos, que genera empleo, que mueve comunidades enteras, que nos conecta con el mundo y que, al mismo tiempo, nos devuelve una mirada renovada sobre quiénes somos. Cada visitante que llega al país no solo recorre nuestros paisajes: se encuentra con nuestra hospitalidad, con la calidez de nuestra gente y con una identidad que queremos proyectar con orgullo.

Pero para mí, esta ocasión tiene un valor aún más profundo: es el último discurso que tengo el honor de pronunciar como presidenta de la Cámara Uruguaya de Turismo. Un momento especial en un proceso riquísimo de conexión y aprendizaje para todo el equipo de directiva de CAMTUR. Han sido 5 años de lo mas diversos, intensos, complejos en algunos casos. Pero que nos han enseñado, a las buenas o a las malas, el valor inmenso de la unidad de criterio y el trabajo colectivo. 

Hemos creado un equipo tan pujante, que estoy convencida de que la Cámara seguirá creciendo, fortaleciéndose como referente del turismo en todo el país, y representando con unidad a cada uno de nuestros asociados. 

Ese mismo espíritu de unidad y trabajo en equipo es el que buscamos cultivar dentro del propio sector privado. Las asociaciones y cámaras que integran esta gran familia turística saben que solo si hablamos con una sola voz podremos defender con fuerza nuestras necesidades y aspiraciones. Y esa voz unida no solo se escucha en las instancias de diálogo con las autoridades: también se siente en cada empresa que abre sus puertas, en cada destino que se promueve, en cada propuesta que se innova.

Permítanme compartir algunas reflexiones sobre el camino recorrido. En estos años, la Cámara ha logrado consolidarse como la voz representativa de un sector diverso y vital. Hemos acompañado a los operadores en la promoción internacional de Uruguay, participando en ferias, rondas de negocios y presentaciones en diversas ciudades en toda la región y también en destinos más lejanos. Así también, hemos trabajado junto a nuestros colegas regionales, presidiendo la Federación Sudamericana de Turismo, convencidos de que integrar rutas y circuitos turísticos sudamericanos nos hace más competitivos y atractivos en mercados lejanos. Junto a FEDESUD lideramos proyectos de cooperación internacional, intercambio de experiencias empresariales exitosas, y trabajamos por una gobernanza efectiva con los gobiernos de Sudamérica.

Hemos acompañado el trabajo conjunto del sector empresarial en la Confederación de Cámaras empresariales. Aportando la visión del turismo y contribuyendo a pensar desde el  empresariado aquellos temas más relevantes para el crecimiento y desarrollo.

La conectividad aérea es clave para el turismo y para el país: más vuelos significan más turistas, más desarrollo y más oportunidades. Hoy Uruguay vive un momento bisagra gracias a la modernización de la normativa aeronáutica y la política de cielos abiertos, que ya está dando resultados concretos.

Gracias a eso hoy podemos tener tres frecuencias semanales entre Montevideo y Salto con una aerolínea extranjera, comprometida, que calificó esta ruta como su lanzamiento más exitoso. Gracias a eso hoy estamos en puertas de iniciar vuelos a Rivera, y Aerolíneas Argentinas acaba de anunciar nuevas rutas desde Brasil hacia Punta del Este. Son hechos que confirman que hay hambre de conectividad y que estamos en el camino correcto y momento de impulsarlo.

Los cielos abiertos sin duda marcan un nuevo capítulo para la aviación. Aunque iniciativas como los incentivos por pasajeros incrementales aún no se concreten, el compromiso del sector de seguir impulsando la conectividad aérea está más vivo que nunca, porque sabemos que de ella depende el futuro del turismo y del desarrollo de Uruguay. El camino es seguir este trabajo diario y esfuerzo conjunto de aerolíneas, aeropuertos, Estado, cámaras y agencias, trabajando con una visión de largo plazo.

La capacitación ha sido otro eje fundamental de nuestro trabajo. Con el apoyo de ANDE e INEFOP llevamos formación a todos los rincones del país, apostando al crecimiento de pequeños emprendedores y trabajadores que sostienen la esencia de nuestro turismo. Algunas de estas experiencias han incluido: La Red de Talentos, El sectorial de turismo, proyectos de formación digital y participación de ferias, entre otros muchos. 

Un pilar del trabajo asociativo son los CAMTUR Conecta, instancia que nos permite mostrar destinos y productos, además de conectar a empresarios y emprendedores de todas las regiones del país con mas oportunidades de negocios. 

También quiero detenerme en un aspecto que para mí tiene un valor especial: el lugar de las mujeres en el turismo. Fui la primera mujer en presidir la Cámara, y hoy me enorgullece ver que ya son varias las colegas que ocupan cargos de liderazgo en distintas entidades del sector. Hemos buscado que este cambio se traduzca en acciones concretas: celebramos cada 8 de marzo con encuentros constructivos, generamos talleres específicos y coordinamos una comisión de género que este año logró un relevamiento de mujeres vinculadas al turismo y un espacio de visibilización dentro de los CAMTUR Conecta. Todos son pasos firmes hacia una mayor equidad, convencidos de que generar oportunidades para todos fortalece a nuestro sector.

La clave, sin dudas, ha sido y seguirá siendo la articulación público-privada. Ningún actor puede lograrlo solo. Necesitamos del Estado, de las cámaras, de las asociaciones, de las empresas y de los trabajadores. Necesitamos del esfuerzo conjunto y de la confianza mutua. Cuando logramos sentarnos en la misma mesa, más allá de las diferencias, el turismo uruguayo se fortalece y los resultados se multiplican.

No puedo dejar de mencionar la relación constante con las autoridades nacionales. Con diálogo firme y constructivo, defendimos al turismo en instancias clave. En momentos muy duros. Pero también impulsamos un dialogo productivo con distintos actores políticos y con el Parlamento en diversos temas.  

Estoy convencida de que este sector merece ocupar un lugar central en la agenda nacional, porque su impacto trasciende las cifras y se traduce en desarrollo real para el país. Hoy todavía lamentablemente el turismo no cuenta con los recursos que merece; recursos y apoyo presupuestal necesarios para impulsar las políticas públicas que le permitan un crecimiento real, más allá del techo de cristal que nos hemos autoimpuesto. El turismo mueve la economía mundial, y es una herramienta fundamental para el crecimiento del Uruguay. 

Con profesionalismo y responsabilidad empresarial, desde hace tres años trabajamos junto a CERES los monitores. Estos nos permiten un doble click sobre la realidad del turismo y un análisis basado en datos, de enorme utilidad tanto para empresas como para el sector público. 

Quedan en marcha, además, varios proyectos que serán hitos para el sector, y permitirán mostrar la fuerza y la diversidad de nuestra oferta turística.

Porque detrás de todo esto hay personas. Están los trabajadores que cada día reciben al turista con una sonrisa; los emprendedores que arriesgan y crean; los jóvenes que ven en el turismo una oportunidad de desarrollo; y las comunidades que entienden que abrirse al visitante es también una forma de crecer. Esa es la riqueza humana que sostiene a esta actividad y la razón por la que celebramos hoy.

Y así llegamos a esta Noche del Sol, que nos llena de orgullo porque nos permite reconocer públicamente a quienes, con creatividad, innovación y compromiso, hacen brillar al turismo uruguayo. No son solo empresas, son historias de dedicación y de sueños cumplidos, que inspiran a todo el sector a seguir adelante.

Todo esto ha sido posible gracias al esfuerzo de cada socio, de cada asociación, y al compromiso de la comisión directiva, que puso tu tiempo y dedicación de forma honoraria por el bien común. A todos ustedes, mi más profundo agradecimiento. Este trabajo, intenso y desafiante, lo hemos hecho con pasión y con la convicción de que cada operador turístico del Uruguay merecía tener una voz fuerte y unida

Hoy me despido de esta responsabilidad con orgullo por lo que hemos construido juntos, y con esperanza en lo que vendrá. Porque el turismo es desarrollo, es unión y es futuro.

Muchas gracias.

Marina Cantera