Con cada año que comienza solemos poner todas nuestras mejores expectativas, nuestros anhelos de superarnos al año anterior. Para el sector turístico, tan castigado desde hace dos años, se inicia una etapa de reactivación.
Una reactivación, sin embargo, que presenta grandes retos y con amenazas por la rápida evolución de la variante Ómicron, de rápida propagación y que en el mundo está dando señales de alerta.
Este nuevo escenario, sin lugar a duda, nos pone nuevamente a enfrentar los desafíos y la incertidumbre de hasta dónde puede llegar a impactar al sector turístico, que está renaciendo en estos dos últimos meses.
Lo que está claro, porque ya es una lección aprendida, es que deberemos enfrentarlo unidos, sector público y privado, trabajando codo a codo con todas nuestras fuerzas, como lo hemos hecho hasta ahora.
El sector no soporta un escenario similar al vivido los dos últimos años, con empresas enfrentándose al cierre, con serias dificultades económicas y con miles de empleados en el seguro de desempleo. El sector turístico no puede parase nuevamente.
Debemos poner todas nuestras fuerzas en seguir caminando, con todos los cuidados, aplicando y haciendo cumplir todos los protocolos, que son imprescindibles respetar para seguir funcionando. Pero no quedan dudas que debemos seguir caminando hacia la reactivación total del sector.
Los impactos de Ómicron en el turismo se están viendo en todo el mundo, con miles de vuelos cancelados; si bien muchos países están flexibilizando las condiciones de cuarentenas, teniendo en cuenta cómo está actuando esta nueva cepa y con los niveles de vacunación que existen. Pero igualmente hay temas de cuarentenas que terminan afectando al sector turístico.
Mirando la reactivación y los desafíos que aún debemos afrontar, la diversidad del sector nos exige mirar cada segmento del turismo, con sus propias particularidades y con sus propias necesidades. Y ese es uno de los desafíos más grandes que tenemos como Cámara, el generar sinergias para aquellas necesidades que nos unen o para los desafíos comunes para todos.
Nos enfrentamos a un año que tiene sus particularidades por esta nueva realidad de la pandemia, pero tenemos a favor que ya tenemos mucho camino de aprendizaje recorrido.
Como sector estamos vivos, pujantes y resilientes a toda esta problemática. Igualmente, las empresas están atravesando un momento de grandes desafíos y tienen que estar preparadas, por lo que debemos contar con apoyo.
Estamos en tratativas para articular un centro de desarrollo empresarial para el turismo con dos objetivos. Uno de los objetivos es la atención a las empresas a través de proyectos y/o capacitaciones. Y otro objetivo es el de dimensionar el sector turístico: la cantidad de empresas, el número de puestos de trabajo que brindan, el aporte económico que hacen al país, entre otras variables.
Nadie discute la importancia económica que el turismo representa para Uruguay, y los miles de empleos que genera. La pandemia nos golpeó duro, a las empresas y a los trabajadores, pero también nos mostró que la unión es el único camino posible para enfrentar las adversidades.
Sigamos juntos, reactivándonos y volviendo a ser de los sectores más importantes en ingreso de divisas para el país.
Marina Cantera
Presidenta de CAMTUR